Riesgos en la cría

Cuando hablamos de la cría o de hacer criar a nuestra hurona generalmente la primeras imágenes o pensamientos que se nos pasan por la cabeza es la belleza de esta experiencia, una barriguita creciendo, un parto emocionante y bello, unos cachorros preciosos que crecen día tras día a una velocidad increíble... Nadie va a negar que esto ocurre, y que se trata de una experiencia preciosa e inolvidable cuando todo va bien.

 

Pero lo primero que tenemos que tener en cuenta cuando nos decidimos finalmente a hacer criar nuestra hurona, es que todo el parto conlleva unos riesgos, riesgos que por muy bien que hagamos las cosas pueden surgir por x motivo. Pero sobre todo riesgos de los que hay que ser plenamente conscientes antes de tomar esta importante decisión.

 

Por ello en éste artículo quiero hablar de los problemas y riesgos que pueden darse  la cría de hurones.

 

Para empezar hay 3 puntos claves a tener en cuenta como punto de partida:

  • Existe siempre la posibilidad de perder a nuestra hurona.

  • Puede que algunas crías o incluso todas no salgan adelante.

  • La cría no es barata y más cuando se tuercen las cosas por lo que existe siempre la posibilidad de que los gastos inicialmente previstos se multipliquen y sobrepasen largamente los gastos que pensábamos íbamos a tener con la camada. De ahí la importancia de tener un buen colchoncito de dinero por si acaso y nunca criar con la perspectiva de sacar grandes beneficios. Criar no es barato.

 

 

 

 

Riesgos y problemas que pueden afectar a la hurona en la cría:

 

 

  • Existe siempre la posibilidad de perder a nuestra hurona.

  • Que coja una piometría tras ser montada por un macho y no quede en estado.

  • Toxemia por gestación: que suele ocurrir en las dos última semanas degestación o primera tras el parto.

    Durante las últimas semanas de gestación se produce el mayor desarrollo de los fetos, ocupan más espacio y sus necesidades energéticas son mayores. El cuerpo de la madre da prioridad a los fetos que al suyo propio y al no haber suficiente cantidad de alimento empieza a convertir los hidratos de carbono almacenados en toxinas y  que se van la sangre.

    Se produce porque en las últimas semanas de gestación hay una bajada en los niveles de glucsa en sangre, lo qeu provoca que se consuman las grasas y carbohidratos de forma masiva, lo que genera gran cantidad de sustancia tóxicas en el organismo. Básicamente la toxemia se debe a falta de aporte energético suficiente para la madre y los fetos, que conlleva a suar las reservas de hidratos y generar de golpe demasiada materia desechable que en grandes cantidades es tóxica. Esto supon mucas  veces un aborto con la consiguiente posibilidad de infección y necesidad de una intervención para extirpar los fetos desarrollados



  • Anemia por mala alimentación o una alimentación desequilibrada.

  • Que la hembra no consiga dar a luz y haya que proceder a una cesárea.

  • Que la hembra no consiga dar a luz y que en el momento de proceder a la cesárea ya sea demasiado tarde para los cachorros.

  • La hurona pueda sufrir una mastitis se trata de una infección en las mamas. Y atención porque una mastitis no tratada puede dar lugar a la necropsia de las mamas.


    Signos clínicos de mastitis: fiebre, diarrea, perdida de apetito; mamas duras, inflamadas de color rojo o amoratadas; dolor en las mamas, leche amarillenta y de aspecto grumosa; aumento de temperatura en la zona de las mamas.


  • Eclampsia o hipocalcemia por bajo nivel de calcio que puede producir la muerte de la hurona.


    La eclampsia consiste  en una bajada en sangre de calcio que puede estar acompañada también de bajo nivel de azúcar en sangre lo que produce temblores muculares suele ocurrir en la 3-4 semana de lactancia. Los síntomas de la eclampsia son jadeos, inquietud, aumento de salivación, hiperestesia, convulsiones parálisis posterior, fiebre, tetania y muerte.

    Los signos clínicos son de evolución rápida y si no se actúa rápidamente pueden tener un trágico desenlace.


    Para tratar la eclampsia el veterinario deberá de realizar una inyección de intraperitoneal de Borogluconato cálcico que suele dar una respuesta rápida y añadir suplementos cálcicos a la dieta de la hurona.


  • Aborto durante la gestación avanzada cuando los fetos ya tienen ciertas estructuras oseas, es decir se trata de fetos parcialmente calsificados y es casi imposible la reabsorción total como ocurre en la reabsorción embrionaria por lo que de no expulsarse dichos restos y permanezcan en la hurona se corre el peligro que se pudran y se de una piometria en la hurona.

  • Hurona pierda mucho peso con el detrimento importante que supone para su salud.

 

Riesgos y problemas que pueden ocurrir y afectar a los cachorros en la cría

    • Las crías no lleguen a nacer porque se produce una reabsorción fetal o un aborto.

    • El parto se retrase y a la hora de realizar la cesárea sea demasiado tarde para los cachorros.

    • Crías que nacen muertas.

    • Crías que fallecen durante los días “ de alto riesgo” (3 primeras semanas de vida).

    • Crías que nacen “defectuosas”. Como por ejemplo con espina bífida.

    • Huronas que se comen a sus crías.

    • Huronas que se exceden en la limpieza de sus crías y se comen extremidades del cuerpo de sus cachorros.

    • Crías que no consiguen mamar porque tiene el paladar hundido, lo que se conoce como fisura palatina.

    • Crías que nacen prematuramente y no sobreviven porque no tienen el instinto de mamar.

    • La hurona no disponga de leche o no tenga suficiente leche para amamantar a sus cachorros. Por lo que tendremos que recurrir a una madre sustituta.

    • Dificultad para encontrar una madre sustituta o simplemente no encontrarla.

    • Hurona rechace a las crías o a unas crías concretas.

    • Hurona rechace a las crías tras una manipulación por nuestra parte.

    • Hurona sustituta no accepte a las crías tampoco.

    • Hurona no sepa que hacer con las crías.

    • Hurona se coma a las crías por no tener una alimentación equilibrada.

    • Enquistamiento de la leche.

    • Hurona padezca mastitis y los cachorros tengan menos de 15 días, edad critica para sacar adelante cachorros sin la ayuda de una madre de sustitución.

    • Por tener que alimentar nosotros a las crías por falta de leche o carencia de madre sustituta las crías sufran de neumonía por aspiración y fallezcan.

    • Tras el nacimiento de pocas crías la hembra pierda la leche y vuelva a entrar en celo.

    • Crías que sufren de infecciones en los ojos ( conjuntivitis) bien porque haya una infección en las mamas (mastitis), condiciones insalubres en la jaula o porque en la época de empezar a darles papillas suele coincidir con el momento en que empiezan a abrirse los ojos y les entre restos de papilla.


    • Crías sufran de prolapso rectal.

    • Hurona demasiado apegada al dueño y desatienda a las crías.

    • Hurona sobreprotectora que nos impida ayudarle con las crías o manipularlas para cualquier intervención necesaria.
    • Hurona tenga mucho sarro en la boca y en el momento del parto, al cortar el cordón umbilical transmita bacterias a las crías y estas padezcan alguna ingección y fallezcan..
    • Hurones mordedores.
    • Crías no cojan peso de manera adecuada.